jueves, 19 de noviembre de 2020

Poemas de María del Pilar Rivera González

 Nocturnos con pinceladas diurnas

 

las luces de neón disfrazan los amantes

los tangos doblan las esquinas

con rumores de otras calles,

simulan agujeros en el tiempo

hologramas de amnesias y osadías.

Trompetero de ángeles

hipnotizan las sábanas,

perforan el tímpano del tiempo,

se camuflan entre camelias de color rojo.

Anulan su memoria

desdoblan su voluntad

traen pequeñas muertes

evadidas del más allá

rápido cura la lógica

la culpabilidad va al exilio.

En urdimbre de cabellos

se cierra en humedades

la jornada.

 

Rubor

Los coyotes de mi país

hablan el mismo idioma

de los coyotes del mundo,

sonríen al dinero

con ortodoncia sin imperfecciones.

Para ellos es igual lanzarse al agua

en los barcos en el Mediterráneo

o sumergirse en pantanos del Darién,

jaguares siempre al acecho.

Cuando el aguacero consuma

el último glóbulo rojo

por aquello de los malos aires

pasará un enjambre a fastidiar la risa

a tatuar un censo, recordatorio del inicio

y el posible final si incumples con la soledad,

a regalar cereales habitados por gorgojos

y su sentencia a morir por desnutrición.

Y así todos alejan el alma

de las pestes que merodean.

                                        María del Pilar Rivera González

1 comentario:

  1. Causa rubor reconocer los coyotes en el poema de María del Pilar, sentido poema.

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