domingo, 11 de septiembre de 2022

Tips para mejorar nuestra ESCRITURA: Capítulo III. Numeral 5. Gerundio correcto e incorrecto.

  Aprovechemos la generosidad del portal Ciudad Seva del escritor LUIS LÓPEZ NIEVES (https://ciudadseva.com/texto/instrucciones-para-escribir-cuentos-o-novelas/) y repasemos los consejos prácticos que nos ofrece para mejorar nuestra narrativa con los temas de ESCRITURA

 

5. Gerundio correcto e incorrecto

 

El “gerundio” es una forma impersonal del verbo que termina en “ndo”, como en caminando o comiendo. Normalmente el uso del gerundio presenta problemas para el escritor principiante… y también para algunos de los más maduros.

¿Dónde está María? Paseando por la playa.

¿Qué haces? Estoy leyendo una novela.

¿Has visto a Pedro? Está rezando en la capilla.

Naturalmente, es preferible que el escritor conozca en detalle las reglas del gerundio. Este no es el lugar para recibir una lección larga y detallada (y aburrida) sobre gramática. Pero, para darte una idea de los usos correctos e incorrectos del gerundio, termino esta nota con los siguientes fragmentos del libro Curso de redacción de Gonzalo Martín Vivaldi:

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El gerundio correcto y el incorrecto

El gerundio constituye una oración subordinada de carácter adverbial. Si yo escribo: “Luis llegó silbando”, indico el modo como llegó “Luis”. En este caso “silbando” es la oración subordinada que completa a la principal “Luis llegó”, diciéndonos su manera de llegar.

Para evitar confusiones, el gerundio debe ir lo más cerca posible del sujeto al cual se refiere. Así, no significa lo mismo “Vi a Juan paseando”, que “Paseando, vi a Juan”. En el primer caso es Juan quien pasea, en el segundo soy yo quien, mientras paseaba, vi a Juan.

Para poner un poco de orden en este problema del gerundio, vamos a estudiar los casos en que consideramos su empleo correcto o incorrecto, según la opinión autorizada de los gramáticos y especialistas del lenguaje.

 

A) Gerundio correcto

1.Gerundio modal. Ejemplo: “Llegó silbando o cantando”.

2Gerundio temporal. Generalmente indica contemporaneidad entre la acción expresada por el verbo principal y el gerundio. Ejemplo: “Vi a Juan paseando”. “Nos llegó la noticia estando en Barcelona”.

(Estos dos casos, en realidad, se pueden reducir a uno solo.)

3. Gerundio que indica acción durativa o matiz de continuidad. Ejemplos: “Está escribiendo”. “Sigo pensando”.

4. Gerundio cuya acción es inmediatamente anterior a la del verbo principal. Ejemplo: “Alzando la mano, la dejó caer sobre la mesa con toda su fuerza”.

5. Gerundio condicional. Ejemplo: “Habiéndolo ordenado el jefe, hay que obedecer”; es decir, “Si lo ordenó el jefe…” -condición.

6.Gerundio causal. Ejemplo: “Conociendo su manera de ser, no puedo creerlo”; es decir, “Porque conozco su manera de ser…” -causa.

7. Gerundio concesivo (poco corriente). Ejemplo: “Lloviendo a cántaros, iría a tu casa”, es decir, “Aunque lloviera a cántaros…” -concesión.

8. Gerundio explicativo. Ejemplo: “El piloto, viendo que el altímetro no funcionaba…”; es decir, “Al ver que el altímetro no funcionaba…” -explicación.

Finalmente, se usa mucho el gerundio de los verbos “arder” y “hervir” con carácter de adjetivo -una olla de agua hirviendo, o ardiendo-, en el sentido de “hirviente” o “ardiente”. Todos decimos: “Le cayó una olla de agua hirviendo”, y no “hirviente”.

 

B) Gerundio incorrecto

Veámoslo a través de unos cuantos ejemplos.

Así, no puede ni debe escribirse:

1. “Llegó sentándose…”, porque la acción de llegar y de sentarse no pueden ser simultáneas, no es ese un “modo” de llegar a ningún sitio.

Es frecuente leer: “Don Fulano de Tal nació en Madrid en 1900, siendo hijo de don Luis y doña María…”. Es decir, que nació siendo ya hijo de… ¡Extraña manera de nacer!

2. “Una caja conteniendo…” Se trata de un típico galicismo; traducción de la expresión francesa: “Une boîte contenant…” Y ello porque el participio de presente francés en -ant (parlant, écrivant, sachant) tiene un valor adjetivo. Nosotros, en español, debemos decir: “Una caja que contiene…” Es también el caso del “gerundio curialesco” o del Boletín Oficial: “Orden disponiendo…”, cuando, en realidad, debe decirse “…que dispone…

Es, por tanto, incorrecto el empleo del gerundio de un verbo que no expresa acción en función de complemento de un nombre.

 

3. Es incorrecto el empleo del gerundio para complementar a un nombre que funciona como complemento indirecto (Dio el paquete a una mujer entrando en la casa, en vez de Dio el paquete a una mujer que entraba en la casa), o complemento circunstancial (Vieron a un hombre dando gritos de dolor, en lugar de Vieron a un hombre que daba gritos de dolor).

4. “Vi un árbol floreciendo”, por “floreciente”. Tampoco puede admitirse este “floreciendo” porque el gerundio, en español, no debe expresar cualidades. Ni tampoco se refleja aquí el matiz de contemporaneidad, ya que es imposible que yo vea “el florecer” de un árbol, mientras se produce, a menos que se trate de una película de dibujos fantástica, o gracias a un procedimiento especial cinematográfico, capaz de captar el florecer de un árbol mientras se va produciendo.

5. “El avión se estrelló, siendo encontrado…” “El agresor huyó siendo detenido…” Estos gerundios son incorrectos porque la acción que el gerundio indica no puede ser posterior a la del verbo principal. Lo correcto es escribir: “El agresor huyó y fue detenido cuando intentaba subir al tranvía”.

No es correcto el gerundio de posterioridad porque, cuando es simple, indica simultaneidad: “La farola cayó sobre el coche muriendo sus ocupantes”, ya que debe decirse: “La farola cayó sobre el coche y, como consecuencia, murieron sus ocupantes”.

En el caso del gerundio temporal, la acción que expresa dicha forma verbal puede ser simultánea, inmediatamente anterior o inmediatamente posterior a la acción expresada por el verbo principal.

Ejemplos:

Teniendo yo doce años, aprendí a montar en bicicleta (simultánea). Levantando la mano, quedó con la pluma en suspenso (inmediatamente anterior). Salió de puntillas, cerrando la puerta con mucho cuidado (inmediatamente posterior).

 

Conclusiones. Consideramos muy difícil que el alumno, al escribir, retenga en la memoria todas las reglas que hemos dado acerca del gerundio. Por ello, recomendamos seguir la pauta del conocido aforismo: “En la duda, abstente”. Es decir, no usemos el gerundio cuando no estemos muy seguros de que su empleo es correcto. Siempre será posible recurrir a otra forma verbal. Por ejemplo: en vez de “Nos llegó la noticia estando en Barcelona”, podemos escribir: “Nos llegó la noticia cuando estábamos en Barcelona”.

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